ELEMENTOS CONSTITUYENTES DEL MEDIO AMBIENTE
El medio ambiente esta constituido por una serie de elementos que al mezclarse crean una serie de condiciones que hacen posible la subsistencia y desarrollo de la vida.
La Atmósfera, es una capa protectora que protege el medio ambiente del exceso dañino a la exposición de los rayos ultravioletas del sol; esta constituida por una mezcla en forma de gas de oxigeno, nitrógeno, dióxido de carbono, vapor de agua e hidrógeno.
El agua, constituye cerca del 75% de la superficie terrestre distribuida en un 97% en los océanos, un 2% en glaciares de hielo ubicados en los polos y el restante 1% en agua dulce que podemos encontrar en ríos, lagos, aguas subterráneas, humedad atmosférica y en el suelo.
El suelo es la capa más superficial de la corteza terrestre, es el delgado manto de materia en el que se desarrolla la vida terrestre. En el suelo se encuentra el soporte de toda la cubierta vegetal y regenera las capas de agua subterráneas.
El aire que nos da soporte para la vida se encuentra manera natural en el medio ambiente es una mezcla de gases constituido en 78% por nitrógeno, un 21% de oxigeno y el 1% restante es el conjunto de pequeñas cantidades de gases naturales y vapor de agua.
Atmósfera
protege a la Tierra del exceso de radiación ultravioleta y permite la existencia de vida es una mezcla gaseosa de nitrógeno, oxígeno, hidrógeno, dióxido de carbono, vapor de agua, otros elementos y compuestos, y partículas de polvo. Calentada por el Sol y la energía radiante de la Tierra, la atmósfera circula en torno al planeta y modifica las diferencias térmicas. Por lo que se refiere al agua, un 97% se encuentra en los océanos, un 2% es hielo y el 1% restante es el agua dulce de los ríos, los lagos, las aguas subterráneas y la humedad atmosférica y del suelo. El suelo es el delgado manto de materia que sustenta la vida terrestre. Es producto de la interacción del clima y del sustrato rocoso o roca madre, como las morrenas glaciares y las rocas sedimentarias, y de la vegetación. De todos ellos dependen los organismos vivos, incluyendo los seres humanos. Las plantas se sirven del agua, del dióxido de carbono y de la luz solar para convertir materias primas en carbohidratos por medio de la fotosíntesis; la vida animal, a su vez, depende de las plantas en una secuencia de vínculos interconectados conocida como red trófica.
Durante su larga historia, la Tierra ha cambiado lentamente. La deriva continental (resultado de la tectónica de placas) separó las masas continentales, los océanos invadieron tierra firme y se retiraron de ella, y se alzaron y erosionaron montañas, depositando sedimentos a lo largo de las costas ( véase Geología). Los climas se caldearon y enfriaron, y aparecieron y desaparecieron formas de vida al cambiar el medio ambiente. El más reciente de los acontecimientos medioambientales importantes en la historia de la Tierra se produjo en el cuaternario, durante el pleistoceno (entre 1,64 millones y 10.000 años atrás), llamado también periodo glacial. El clima subtropical desapareció y cambió la faz del hemisferio norte. Grandes capas de hielo avanzaron y se retiraron cuatro veces en América del Norte y tres en Europa, haciendo oscilar el clima de frío a templado, influyendo en la vida vegetal y animal y, en última instancia, dando lugar al clima que hoy conocemos. Nuestra era recibe, indistintamente, los nombres de reciente, postglacial y holoceno. Durante este tiempo el medio ambiente del planeta ha permanecido más o menos estable.
